Día 10 de Enero
Comenzamos la clase de hoy hablando sobre los grupos sociales con mayor riesgo de exclusión social, que son principalmente:
- Las mujeres con cargas familiares no compartidas: se trata de mujeres que han dedicado la mayor parte de su vida al cuidado de su familia y que por lo tanto sus ingresos dependen de su marido y su familia. Como consecuencia de ello, al no tener formación los trabajos que puede realizar son de baja cualificación profesional.
- Jóvenes en situación de fracaso o abandono escolar: generalmente se trata de jóvenes proceden de hogares con carencias socioeconómicas y culturales los cuales abandonan a una edad temprana el colegio, precedido por una trayectoria de fracaso escolar.
- La comunidad gitana: es un grupo que normalmente ha sido excluido de las relaciones económicas y socioculturales normalizadas. Su vida tiene lugar en torno a familias de su misma etnia, y con este aislamiento se refuerzan los estereotipos que se tienen sobre ellos en cuando a perfil laboral y entran en un ámbito de marginalidad económica.
- Adultos desempleados de larga duración: son personas de más de cuarenta y cinco años con una situación de desempleo prolongada y con una baja capacitación educativa y profesional. Por todo ello presentan dificultades para la inserción laboral.
- Personas sin hogar: es un colectivo que padece situaciones de exclusión social en el ámbito personal, familiar, sociolaboral y económico. La reinserción social de estas personas es muy difícil por la falta de motivación personal que tienen y carencias educativas y laborales.
Tras estos vimos el fenómeno de adaptación e inadaptación como proceso (AYERBE, 2000). Las fases que se distinguen en este proceso son:
- Inadaptación objetiva: se da cuando el sujeto empieza a desarrollar conductas desadaptadas.
- Inadaptación subjetiva: cuando las instituciones protectoras y correctoras intervienen, se profundiza en el conflicto personalizándolo e institucionalizándolo.
Por otro lado encontramos las fases históricas de la respuesta social a la inadaptación, las cuales solo recordamos puesto que ya las vimos más detenidamente anteriormente y que eran: cuales simplemente voy a nombrar ya las vimos con más profundiza en una enseñanza básica con Almudena. Son las siguientes;
- Fase represiva
- Fase de beneficencia
- Fase terapéutica, técnica o de trabajo de casos.
- Fase crítica o de trabajo comunitario.
Terminamos esta clase viendo los diferentes enfoques de intervención, que se consideran más significativos en cada grupo de población. Diferenciamos entre población en situación de riesgo social o de población en conflicto social, pues dada la casuística de cada uno de estos grupos, también la planificación del tratamiento puede hacerse desde un enfoque u otro.
A. Población en riesgo social:
o Enfoque socioambientalista: acentúa la importancia de los factores ambientales y los programas de intervención se centran en cambios ambientales. Un ejemplo de este enfoque podría ser poner rampas para discapacitados.
o Enfoque conductista y de aprendizaje: para estas teorías la situación de riesgo es el resultado de déficit educativos y del desconocimiento de los padres de cómo ejercer el rol parental. Se trata por tanto de desarrollar tratamiento que modifiquen conductas negativas en los padres.
o Enfoque psicodinámico: los programas de intervención consisten en la exploración de sentimientos y experiencias pasadas. La conducta es vista como algo sintomático, y la intervención se dirige a la causa de estos síntomas más que a las propias conductas.
o Enfoque sistémico: se entiende que el individuo con problemas forma parte de una red de relaciones o de un sistema, el familiar, con lo que es preciso actuar sobre el sistema de red de interacciones para poder cambiar al individuo.
Al trabajar con poblaciones en situación de riesgo social, en cualquiera de los enfoques y cualquiera que sea la situación, lo primero que se tiene que hacer es calcular los riesgos que corren los niños y tomar las medidas necesarias. Centrándonos específicamente en el ámbito del maltrato infantil, se han desarrollado los siguientes enfoques (Gracia y Musitu, 1993):
o Enfoque psicológico-psiquiátrico: se considera que son las características psicológicas y los desordenes psicopatológicos de los padres los principales factores explicativos del maltrato infantil. La atención se centra principalmente en el padre.
o Enfoque sociológico o sociocultural: parte de la idea de que las condiciones que deterioran la vida familiar, los valores y prácticas culturales que sostienen y justifican el uso de la violencia, son los principales responsables del maltrato infantil.
o Enfoque socio-interaccional: se centra en el análisis de ciertas conductas del niño en interacción con las experiencias y competencia parental, así como en los altos niveles de estrés en la familia, pueden actuar como condiciones desencadenantes del maltrato.
o Enfoque ecológico o ecosistémico: el maltrato infantil está determinado por fuerzas que actúan en el individuo, en la familia, en la comunidad, y en la cultura en la que el individuo y la familia están inmersos.
o Enfoque transicional: enfoque de carácter integrador postulado por Wolfe el cual describe tres estadios en la relación de conflicto padres-hijos:
- Fase1: hay una baja resistencia al estrés y una falta de inhibición de la agresión
- Fase2: la capacidad para enfrentarse a provocaciones.
- Fase3: se desarrollan hábitos de violencia y agresión entre los miembros de la familia.
B. Población en conflicto social.
o Enfoque psico- dinámico: en este enfoque cabe destacar a un educador austríaco en su obra Wayword Youth el cual hace la primera tentativa sistemática de aplicar los principios del psicoanálisis en la reeducación del pre delincuente en un centro especial o reformatorio. Los objetivos de esta nueva concepción de la reeducación pasaban por reconciliar al joven con la sociedad y orientarle a vivir según el principio de realidad. Él y sus colaboradores habían decidido mantener una actitud de amistad con los jóvenes y a la vez evitaban oponerse a ellos. Según Aichhorn estos chicos esperaban ser castigados duramente por su comportamiento. Los jóvenes provocaban continuamente porque querían ser castigados inconscientemente.
o Enfoque humanista y de orientación especializada: concibe la intervención como una relación “que se establece entre una persona más conocedora y otra menos conocedora”. El asesor tiene unos conocimientos especializados y aplica unas técnicas a los problemas de los otros.
o Enfoque sistémico: no concibe la intervención educativa sobre el menor al margen del contexto familiar. El menor está inmerso en un subsistema, la familia, y unos subsistemas que se relacionan. Interesa saber cuáles con los diferentes roles familiares, el lugar que ocupa el menor en la familia.
o Enfoque cognitivo: plantea un mejor ajuste social y como consecuencia una redacción o desaparición de la conducta delictiva de un individuo.
Día 11/1/12
Comenzamos esta clase viendo las nuevas formas y los nuevos modelos de intervención en inadaptación social.
Ross y Fabiano hacen en 1985 “nuevos estudios” partiendo de la pregunta qué es lo que funciona, y no como anteriormente, cuando se pensaba que la desadaptación era algo elegido qué es lo que puede funciona.
Intentaron ver cuáles eran las habilidades cuyo déficit mantiene causas de desadaptación, y enumeraron las siguientes:
1. Autocontrol: hace referencia a que la persona desadaptada sea dueño de sus actos. Como conducirse a la hora de tomar decisiones.
2. Estilo cognitivo: se refiere al cambio conductual de la persona/s desadaptada/s mediante la incidencia de un conjunto de variables cognitivas que condicionan su manera de razonar, tomar decisiones, e interaccionar con el medio social
3. Locus de control: dónde localizamos el control de nuestra vida. Los desapdaptados ven causa de sus males fuera de ella el barrio la mala suerte . Tienen la sensacion de que no controlan su vida el control lo tienen otro: para que voy estudiar si no voy a encontrar trabajo
4. Percepción social: la percepción que tenían de su entorno social por lo que no sabían desenvolverse en ellas
5. Empatía: en ellos era nula. Tenían una actitud bastante egocéntrica
6. Habilidades resolución problemas interpersonales:
ü Conciencia del problema: dificultad en que vieran que tenían un problema
ü Pensamiento alternativo: no veían otras alternativas, a pesar de que a veces se ha tomado conciencia del problema
ü Pensamiento medios-fines: no ven la relación entre medios y fines eje, por ejemplo, no sé qué pasos he de seguir para llegar a la universidad.
ü Pensamiento consecuente: no tomo conciencia de las consecuencias que tienen los actos.
ü Pensamiento causa-medios sociales
Estos mismos autores hicieron un estudio sobre factores que consideran claves de los programas que sí funcionaban:
- Tipo de técnicas de intervención aplicadas
- Perfil de los profesionales (especializados)
- Relaciones entre los profesionales y los individuos que siguen el programa
- Grado en que se atienden factores sociales y económicos del sujeto.
- Intensidad y duración del programa (Si yo quiero cambiar la cualificación de una persona no lo puedo hacer en un curso de 20 horas.) Normalmente el límite lo ponen las subvenciones.
Es decir, la clave del éxito de los programas que ellos identificaron como efectivos no está solo en el contenido de los mismos, sino también en cómo se abordan estos contenidos, en quién los aborda, en la dinámica relacional que se establece y la atención a la situación social del sujeto problemático.